Como otros rastros, el de Matamoros comprende las instalaciones físicas destinadas al sacrifico de animales para consumo humano. Cuenta con personal, equipo y herramientas para su operación, e incluye las áreas destinadas a los corrales de desembarque y de depósito, así como a la matanza. Entró en funcionamiento en los años 1960, y es propiedad y está operado por la Unión de Comerciantes de Carne (UCC) de Matamoros.
Estado actual
Desde hace ya algunos años se considera disfuncional y se halla en malas condiciones, con lo que se recomienda su mejora y reubicación. Al menos desde 2009, el Gobierno Municipal de Matamoros y la UCC se hallan en negociaciones, que sin embargo hasta ahora no han avanzado mucho.
Salubridad
Según la Secretaría de Salud, presenta las siguientes irregularidades:
- Servicio sanitario deteriorado.
- No se utiliza ropa adecuada para la matanza.
- El edificio está sucio y no se realiza un trabajo adecuado, por falta de agua.
- No hay letreros visibles que indiquen al personal el lavado de sus manos.
- Los mosquiteros están en mal estado.
Asimismo, se localiza en un área “no apta” de acuerdo a las normas de salud ya que, debido al crecimiento de la ciudad, se halla dentro de la zona urbana. De acuerdo a la norma debe estar en la periferia de la ciudad.
Demanda
Por otra parte, en los últimos años se ha estado registrando una baja en cuanto a la cantidad de ganado vacuno sacrificado. Según información de la UCC, en las décadas de 1980 y 1990, la matanza de reces se situaba alrededor de 170-180 por día, además de ovinos, caprinos y cerdos. Posteriormente descendió a 30-35 reses por día, hasta la casi nula actividad actual; solo los viernes se alcanza una cantidad de 12-15 reses. Esta poca actividad implica que se deberá reducir el personal.
Aunado con la disminución de la actividad, gran parte del ganado vacuno que se sacrifica en el rastro procede de fuera de Matamoros, con lo que se elevan los costos debido al flete. Actualmente, las reses sacrificadas proceden principalmente de Sonora, Sinaloa y Nuevo León. Solamente los cerdos proceden de Río Bravo, Valle Hermoso y Matamoros.
Los motivos principales del declive de la actividad del rastro son dos. Primero, la disminución del sector ganadero en Matamoros a partir del crecimiento de la agricultura de riego con la creación del Distrito de Riego 025 Bajo Río Bravo. Segundo, y como consecuencia de lo anterior, se incrementó la necesidad de traer animales de otros lugares; esto se acentuó en los años 1990-2000 con la llegada de empacadoras de Monterrey y de distribuidoras de carne ya procesada.
Remodelación
Para la remodelación y reubicación del rastro, según la normativa de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA), es necesario que el edificio pase a ser de titularidad municipal. La construcción de un establecimiento Tipo Inspección Federal (TIF) se ha cotizado en unos 8 millones de pesos.
Bajo Bravo - Rio Grande Valley 